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ALBERT LEDESMA CASTELLTORT. Director del primer centro de salud espa�ol |
M�dicos empresarios |
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ISABEL PERANCHO
El primer centro de salud espa�ol autogestionado entrar� en funcionamiento el
pr�ximo mes de enero.
Equipo de Atenci�n Primaria Vic, Sociedad Limitada. Este
es el nombre de la empresa con la que cinco m�dicos de cabecera, un pediatra,
un odont�logo y tres enfermeras, todos catalanes, optar�n a la adjudicaci�n de
un contrato para prestar asistencia a un sector de la poblaci�n de Vic
(Barcelona). La iniciativa responde a una propuesta del Servicio Catal�n de la
Salud (SCS), que ha querido diversificar la oferta de proveedores sanitarios en
la atenci�n primaria, ofreciendo a los profesionales la posibilidad de
convertirse en empresarios.
Se trata de una f�rmula asistencial in�dita en el primer escal�n sanitario.
�Los m�dicos y enfermeras nos contrataremos laboralmente, fijaremos la pol�tica
retributiva, dictaremos nuestras propias normas de funcionamiento interno,
podremos negociar directamente la compra de determinados productos y adaptar la
oferta de servicios y profesionales de acuerdo a la demanda de nuestra
poblaci�n�, se�ala el doctor Albert Ledesma, m�dico de familia y director de la
nueva empresa.
La Ley de Ordenaci�n Sanitaria (LLOSC) de la Generalitat de 1990, fue la espita
que abri� la puerta a introducir en la asistencia primaria nuevos modelos de
gesti�n, que ya se daban en los hospitales. Un total de 18 zonas b�sicas de
salud catalanas est�n adscritas a empresas hospitalarias privadas, con
participaci�n p�blica o mutuales. Pero nunca antes se hab�a invitado a los
profesionales a crear su propia empresa y �alquilar� sus servicios a la sanidad
p�blica.
Albert Ledesma trabajaba como m�dico en un centro de la comarca de Osona
(Barcelona) cuando en noviembre de 1993, recibi� el encargo de estudiar el
nuevo proyecto. �En un principio, se pens� en que fuera una experiencia piloto,
pero finalmente la Conselleria de Sanitat, el SCS y el Colegio Oficial de
M�dicos de Barcelona (COMB) elaboraron una propuesta definitiva que se elev� al
Parlamento catal�n y dio como resultado la modificaci�n de la LLOSC�. Esta
reforma legislativa -aprobada el pasado 20 de septiembre- permite contratar
servicios de atenci�n primaria a entidades de base asociativa constituidas,
total o mayoritariamente, por profesionales estatutarios de la Seguridad
Social.
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La excedencia
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Para alentar la iniciativa empresarial, a estos funcionarios sanitarios se les
concede una excedencia extraordinaria de tres a�os, durante los cuales pueden,
si lo desean, reintegrarse a su antiguo puesto y lugar de trabajo. El COMB se
ha sumado a la idea y ha creado una fundaci�n para dar soporte jur�dico y
administrativo a empresas de este tipo. Adem�s, como apoyo a esta primera
experiencia, se ha encargado de la compra, adecuaci�n y equipamiento del nuevo
centro de salud de Vic, que quedar� a disposici�n del SCS.
El contrato con el SCS obliga a la empresa a prestar asistencia a 16.445
personas adscritas a la sanidad p�blica, en las mismas condiciones y bajo los
mismos criterios de actividad que cualquier otro centro de salud, si bien, como
entidad privada, puede extender su oferta a los ciudadanos particulares y
establecer conciertos con aseguradoras sanitarias.
�No hay limitaciones de ning�n tipo�, dice Ledesma. As�, por ejemplo, podr�n
elegir a qu� hospital p�blico derivar a sus pacientes y negociar directamente
con �stos mejores condiciones de acceso. Como novedad introducir�n asistencia
odontol�gica infantil (salvo ortodoncias), tarea que no se realiza de forma
rutinaria en los dem�s centros.
En su opini�n, esta ruptura con el estatus �funcionarial� redundar� en una
mayor dedicaci�n. Y para el paciente: �Ofreceremos un contacto m�s estrecho,
con ampliaci�n de horario, y una mayor permanencia en su puesto del trabajador
a lo largo del tiempo. Dos caracter�sticas que, junto a la cualificaci�n
profesional, son las que m�s demanda el usuario�. �Les har� la mentalidad
empresarial escatimar en atenci�n? Ledesma es tajante: �Si lo hacemos mal,
nuestros pacientes se marchar�n a otros centros. Nuestro presupuesto en pruebas
complementarias y en visitas al especialista se ha establecido en funci�n al de
otras zonas de salud similares. Y adem�s, siempre podemos adaptar nuestra
plantilla a la demanda�. Queda por saber si esta f�rmula permitir� al sistema
p�blico catal�n reducir costes sanitarios y si el establecimiento de mecanismos
de competencia repercutir� en una atenci�n de mayor calidad.
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